¿Estás viviendo la maternidad que soñaste?
Recuerdo, en mi niñez, mucho antes de pensar incluso en ser madre algún día, que no disfrutaba del todo mi dinámica familiar.
Te contaré algo bien personal. Yo soñaba con una familia unida donde sintiera que podíamos compartir abiertamente todos juntos cualquier tipo de actividad, especialmente en casa, solía añorar algo tan simple como un almuerzo de calidad en familia.
Con esto no te digo que fui rechazada ni mucho menos que me faltó amor, nada de eso. Solo te cuento cómo es que aun recibiendo amor mis expectativas más profundas no iban totalmente acorde a con mis necesidades afectivas, en especial porque hubo tantas correcciones vacías, correcciones que nunca entendí, y que así mismo crearon en mí un vacío; pues un simple “porque yo lo digo” o quizás tan solo un “cállate” no hacían más que cambiar mi comportamiento del momento sin dejarme ningún tipo de enseñanza mas que dolor e incertidumbre.
Dice Gaudencio Rodríguez Juárez que “las habilidades para la crianza no son heredables genéticamente ni se adquieren de forma espontánea y mágica. Son una función que require un aprendizaje continuo e inversion emocional. El amor no alcanza. Es necesario prepararse, porque para esta labor son necesarios el amor y la ciencia.” Entonces así lo hice, y continúo haciendo, pues la maternidad es para siempre:
1. Preparación. Educarse en la crianza y familia que quieres lograr es el primer paso.
2. Experimentar. Primero fui hija y luego soy madre.
3. Acompañar a otros padres con la misma necesidad y sueño de una vida en familia y crianza respetuosa.
Lo que quizás fue un “problema” hoy es una luz de esperanza en este duro pero encantador camino. Porque todo tiene un propósito en nuestras vidas, una enseñanza y un fin.
Así le he dado un cambio de nombre, pero no de esencia, a esta cuenta. 🤗 Gracias por seguir conmigo en este espacio, ¡¡lo mejor está por venir!!
Recuerdo, en mi niñez, mucho antes de pensar incluso en ser madre algún día, que no disfrutaba del todo mi dinámica familiar.
Te contaré algo bien personal. Yo soñaba con una familia unida donde sintiera que podíamos compartir abiertamente todos juntos cualquier tipo de actividad, especialmente en casa, solía añorar algo tan simple como un almuerzo de calidad en familia.
Con esto no te digo que fui rechazada ni mucho menos que me faltó amor, nada de eso. Solo te cuento cómo es que aun recibiendo amor mis expectativas más profundas no iban totalmente acorde a con mis necesidades afectivas, en especial porque hubo tantas correcciones vacías, correcciones que nunca entendí, y que así mismo crearon en mí un vacío; pues un simple “porque yo lo digo” o quizás tan solo un “cállate” no hacían más que cambiar mi comportamiento del momento sin dejarme ningún tipo de enseñanza mas que dolor e incertidumbre.
Dice Gaudencio Rodríguez Juárez que “las habilidades para la crianza no son heredables genéticamente ni se adquieren de forma espontánea y mágica. Son una función que require un aprendizaje continuo e inversion emocional. El amor no alcanza. Es necesario prepararse, porque para esta labor son necesarios el amor y la ciencia.” Entonces así lo hice, y continúo haciendo, pues la maternidad es para siempre:
1. Preparación. Educarse en la crianza y familia que quieres lograr es el primer paso.
2. Experimentar. Primero fui hija y luego soy madre.
3. Acompañar a otros padres con la misma necesidad y sueño de una vida en familia y crianza respetuosa.
Lo que quizás fue un “problema” hoy es una luz de esperanza en este duro pero encantador camino. Porque todo tiene un propósito en nuestras vidas, una enseñanza y un fin.
Así le he dado un cambio de nombre, pero no de esencia, a esta cuenta. 🤗 Gracias por seguir conmigo en este espacio, ¡¡lo mejor está por venir!!
Comentarios
Publicar un comentario
Toma en cuenta: Nos reservamos el derecho de eliminar comentarios sarcásticos, ofensivos o fuera de tema. En caso de duda, lea la Política de Comentarios.